¿Qué es un sensor de temperatura del coolant y para qué sirve?
¿Qué es el sensor de temperatura del coolant y cuál es su función?
El sensor de temperatura del coolant, también conocido como sensor ECT (Engine Coolant Temperature), es una pieza electrónica que se encarga de medir la temperatura del refrigerante del motor. Este sensor envía esa información a la computadora del vehículo (ECU), la cual ajusta varios sistemas en base a esos datos, como la inyección de combustible, el encendido y el funcionamiento del ventilador del radiador. Su función es esencial porque permite que el motor trabaje con la temperatura adecuada. Si el motor está demasiado frío o demasiado caliente, el rendimiento del vehículo puede verse afectado. Por eso, un sensor ECT en buen estado es clave para lograr un funcionamiento eficiente y seguro del automóvil.
Normalmente se encuentra cerca del termostato o en el bloque del motor, ya que necesita estar en contacto directo con el refrigerante para medir su temperatura con precisión. En la mayoría de los casos, tiene una rosca que se instala en una cavidad por donde circula el refrigerante. Este sensor funciona midiendo la resistencia eléctrica. A medida que cambia la temperatura del refrigerante, también cambia la resistencia dentro del sensor, y esa variación se traduce en una señal que la ECU interpreta. Cuando el motor está frío, la resistencia es alta; cuando está caliente, la resistencia disminuye.
Señales de un sensor de temperatura del coolant dañado
Cuando el sensor ECT comienza a fallar, uno de los primeros síntomas puede ser el encendido de la luz de “Check Engine”. También puede notarse que el motor tarda más en calentarse o, por el contrario, que se sobrecalienta rápidamente. Estos comportamientos pueden ser señal de que el sensor está enviando datos incorrectos a la computadora. Otros síntomas comunes incluyen: aumento en el consumo de gasolina, arranques difíciles en frío, ventilador del radiador que no se enciende o que se queda prendido más tiempo del necesario. Incluso puede haber emisiones contaminantes más altas debido a una mala mezcla aire-combustible.
¿Qué puede causar la falla del sensor ECT?
Las causas más comunes de falla en el sensor de temperatura del coolant son el paso del tiempo, la exposición constante a altas temperaturas y la acumulación de residuos o corrosión. También puede dañarse por una fuga de refrigerante que afecte su contacto o por un cortocircuito en su cableado. Si el conector del sensor está sucio o flojo, también puede generar señales incorrectas. Por eso, es importante revisar no solo el sensor, sino también sus terminales y cables, especialmente si se han presentado fallas intermitentes o si la lectura de temperatura en el tablero es inestable.
¿Cuándo y cómo reemplazar el sensor de temperatura del coolant?
El reemplazo del sensor ECT se recomienda cuando se confirma que está dañado o que sus lecturas no son confiables. No es una reparación costosa ni complicada, pero debe hacerse con cuidado, ya que implica drenar parte del refrigerante y evitar que el aire entre en el sistema de enfriamiento. Lo ideal es utilizar un sensor compatible con la marca y modelo del vehículo. También se recomienda cambiar el refrigerante si está sucio o contaminado, ya que esto puede afectar la lectura del nuevo sensor. Si no se tiene experiencia, lo mejor es acudir a un técnico automotriz para una instalación segura.
Conclusión
El sensor de temperatura del coolant es una pieza fundamental para el control térmico del motor. Su buen funcionamiento permite evitar sobrecalentamientos, mejorar el consumo de combustible y proteger la vida útil del motor. Ignorar una falla en este componente puede llevar a daños graves y costosos.
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